Nombre que se da a los altares en que se ponen estatuillas y cuadros de beatos católicos y entidades invocadas. También se ubican allí flores, velas, bebidas, cigarrillos de hoja, cigarros y facas para los rituales. Los dioses predominantes en el candomblé son el Iemanjá, Xango y Oggún. Las figuras de los santos católicos representan lo que se denomina orishas, incluso Jesús, asimismo llamado Oxalá.
Retiró gravemente el cadáver de su pollo, y en vez de comérselo, se lo mostró a sus amigos, con lo que comenzó a circular por el pueblo la leyenda de mi brutalidad imperialista. Tuve que reforzar el cerco, acrecentar la vigilancia, subir, en una palabra, mi presupuesto de guerra. El vecino dispone de un perro decidido a todo; yo pienso adquirir un revólver.
Relación ritual entre los fieles, que se interpreta como un auténtico vínculo, si bien éste sea de naturaleza simbólica. El pai que prepara o apronta a los fieles, tiene hijos de religión y éstos por su parte hermanos de religión. Persona que ayuda al pai de santo a llevar adelante la sesión. Aquél que es poseído por entre las entidades invocadas, porque se supone que el espíritu «cabalga» al ser humano. Nombre dado en Río Grande del Sur al culto donde se evocan los orishas. Fuerza mágica contenida en determinados elementos, como la sangre de los animales sacrificados, pases o bendiciones que hacen los iniciados en estado de posesión o incluso los tambores.
La prensa aireó el altercado, lo que desembocó en el exilio de Barrett en Argentina, Paraguay y Uruguay. Pronto tomó conciencia de la complicada situación popular latinoamericana. Conoció los sindicatos, la represión policial y las leyes anti-migratorias, momento en el que se asomó al anarquismo. En aquel entonces, nació su deber hacia las cuestiones sociales; escogió el producto periodístico y el relato corto como herramienta de crítica y lucha. Murió a los 34 años de tuberculosis en Arcachón, Francia. A las gallinas enanas se las conoce popularmente como gallinas kikas o gallina de america.
El gallo del vecino brincó el cerco y se puso a llevar a cabo la corte a mis gallinas y a amargar la existencia de mi gallo. Despedí a pedradas el intruso, pero brincaban el cerco y aovaron en la casa del vecino. Demandé los huevos y mi vecino me aborreció. Desde entonces vi su cara sobre el cerco, su mirada inquisidora y hostil, idéntica a la mía.
Siempre y cuando adquiría una gallina la anudaba un par de días a un árbol, para imponerle mi domicilio, destruyendo en su memoria frágil el amor a su antigua residencia. Remendé el cerco de mi patio, con la intención de evitar la evasión de mis aves y la invasión de zorros de cuatro y dos pies. Me aislé, fortifiqué la frontera, tracé una línea mefistofélica entre mi prójimo y yo. Dividí la raza humana en 2 categorías; yo, dueño de mis gallinas, y el resto, que podían quitármelas. El mundo se llena para mí de supuestos ladrones, y por vez primera lancé al otro lado del cerco una observación hostil.
Mientras que no tenía más que mi catre y mis libros, fui feliz. En este momento tengo nueve gallinas y un gallo, y mi alma está perturbada. Posesión de un humano por las entidades invocadas en la umbanda y la quimbanda. Esta percepción es compartida por la prensa o por ciertos sectores de la Iglesia, que no ven el desarrollo de este culto con agrado.
Los espíritus jamás mueren viajan en eterno viaje a otros mundos y en ocasiones reencarnan en otro cuerpo físico. Toda vez que el espiritista reciba una guía espiritual, la cabeza del espiritista y la del espíritu es llevada a otros planos de la conciencia. Candomble.Opiniones africanas en cuya liturgia interviene la adoración a las distintas manifestaciones de la naturaleza en sus más variadas formas y representaciones que el hombre logre comprobar. Estas representaciones de la naturaleza son los orishas, fuerza superior, que aglomera los distintos reinos de la creación, como, por servirnos de un ejemplo, el mar, las montañas, los ríos, la flora, la fauna, los vientos, etcétera. Ilustración de Clara-Iris Ramos para el ralato ‘Gallinas’, de libro homónimo de Rafael Barret. /WMagazínMi gallo era bastante joven.
Ciertas sacerdotisas o maes de santoencienden candelas y purifican y ordenan novedosas sacerdotisas. A medida que el sol se pone, la multitud decora pequeños botes de madera con flores, velas y figuritas de los santurrones. En la medianoche los barcos se sueltan.
