Animal Que Roba Huevos De Gallina

En el momento en que algún vecino conseguía matar uno o múltiples zorros, éstos eran exhibidos por el pueblo al objeto de recaudar ciertas monedas que los vecinos entregaban de buen grado al cazador como premio a la captura del depredador. Un hombre que asistió a un gallinero y pilló a una serpiente comiéndose los huevos de las gallinas filmó las imágenes que en las últimas horas no han parado de compartirse en las comunidades. Aunque no tiene que ver con un hecho insólito, ver de qué manera el reptil devolvía los huevos en la mano del hombre parece haber hecho gracia.

Hemos visto que había dos letrados que parecían ser expertos en este área, ya que aparecen en la reseña de múltiples de esos juicios. Eran los señores Cuerda y Tabar, probablemente parientes de otros abogados con esos apellidos que conocimos en nuestra localidad en la época de hoy.

Aves Rapaces

La gallina era muy apreciada en aquellos tiempos de estrecheces económicas, puesto que suministraba los indispensables huevos, adecuados para cualquier receta. El consumo de su carne -y la de los pollos- cocinada o asada en el horno de la “cocina económica” que funcionaba con leña, era un plato especial reservado para cada domingo, días festivos y celebraciones especiales. Nos situamos a inicios del siglo XX, época en la cual los bolsillos estaban más bien flojos y, por este motivo, en los pueblos alaveses se gastaba poquísimo dinero en conseguir comibles. También podemos emplear para ahuyentar orines de predadores como el lobo o pelo humano pues varios animales escapan de estos fragancias.

animal que roba huevos de gallina

Lo que sabemos es que, entre los tres ejemplares, se ha podido reconstruir casi completamente la apariencia de estos animales que vivieron hace 66 millones de años en lo que hoy son Dakota del Norte y Dakota del Sur. Su aspecto sería el de una «supergallina» de entre 200 y 300 kg de masa corporal, 1,5 m de altura al nivel de sus caderas y unos 3,5 m de longitud, sabiendo que parte importante de exactamente la misma correspondería a una cola de la que carecen nuestras aves de corral. Otra diferencia notable radica en la configuración de sus extremidades precedentes, con unas garras que bien de forma fácil nos podrían sacar un ojo en aquel callejón imaginario.

Como Proteger El Gallinero

En el primer mes del año de 1908 dos desconocidos realizaron otros tantos latrocinios a lo largo de la noche del 13 al 14 de enero en 2 localidades de la Montaña Alavesa. El primero fue en el pueblo de Musitu, en la casa de Gregorio González, de donde -tras forzar una puerta- se llevaron una piel de vaca sin curtir, un hacha, una soga de cáñamo y una fanega con mazorcas de maíz. La fanega era un envase de madera cuya cabida en volumen – anterior al sistema métrico decimal -, equivalía al grano que era necesario para cultivar un campo de unos 2.500 m2.

La responsabilidad o no de los acusados fue analizada por un tribunal popular escogido para la ocasión, compuesto por múltiples ciudadanos. Reunido exactamente el mismo día tras la visión, los declaro culpables de un hurto y de un hurto. En el mes de noviembre del mismo año –1908– se festejó el juicio contra los autores de ámbas sustracciones.

La Granja En Línea

El animal al haber engullido el ‘manjar’, de un diámetro bastante superior al del orificio por donde había metido la cabeza, no podía abandonar la escena. En ese momento el hombre, mientras que prosigue grabando, pone la mano bajo la boca de la serpiente, en lo que se convirtió en una escena divertida por el hecho de que daba la sensación de que el reptil le se encontraba devolviendo uno a uno los huevos. Lo interesante personalmente para mí de este relato es que los vecinos de Birgara Goien Juana Ocariz y Victoriano López de Vicuña, dueños del borde de donde se llevaron los ladrones las gallinas, son mis bisabuelos por parte materna. Conque no me resisto a publicar una foto del álbum familiar, donde aparece mi abuela Justa Rufina, hija de ambos, a la que a propósito no conocí ya que falleció a temprana edad, al ofrecer a luz a su cuarto hijo.

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Por su parte, la edad del agricultor se correlacionó directa e de forma indirecta con el tamaño de la granja y el número de sílabas en las llamadas de cuco. Así mismo, vinculando el folklore a la ciencia, los investigadores han proporcionado una explicación al viejo dicho. Anzu, con nombre de pájaro ladrón mesopotámico,es un oviraptorosaurio, el conjunto de dinosaurios al que el destino jugó una mala pasada. Cuando muchas décadas después se verificó que en huevos como los del nido supuestamente saqueado había «oviraptorcillos» fosilizados se comprendió que quien se encontraba encima, lejos de pretender devorarlos, murió en el momento en que estaba protegiendo su puesta.

Los Ladrones De Gallinas

Es rigurosamente nocturna, y se puede observar por toda la Península Ibérica por bosques, matorrales, roquedos o zonas rurales y suburbanas. Acostumbra tener múltiples madrigueras entre tejados, rocas y tocones de árboles viejos las que ocupa indistintamente.

Una vez de realizado el robo, los ladrones las consumieron en una venta próxima, tras encargar a la dueña que las guisara. Debían de tener la mano muy ligera, ya que tras la cargada comida, le robaron a la propietaria de la posada unas morcillas. Durante el día, las gallinas y los pollos picoteaban al aire libre en los terrenos próximos a la viviendas; tenían como enemigo arriesgado al raposo, que aprovechaba esa circunstancia para capturar la presa. Era con la capacidad de arrimarse hasta los corrales del casco urbano o a los caseríos apartados e incluso traspasar a la luz del día en las cuadras, si estaban abiertas.

Un viejo dicho apunta que el número de llamadas del cuco indica la longevidad de los oyentes. Para evaluar esta hipótesis unos científicos recopilaron datos sobre las llamadas del cuco, la edad de los labradores y el tamaño de la granja. La evidencia sugería que las llamadas del cuco tienen la posibilidad de descubrir información sobre la calidad del hábitat.

La mayoría de la alimentación de las familias en las aldeas se conseguía de lo que se producía en casa y se consumían los frutos que los propios labradores cultivaban. Muchos de los vecinos disponían de una huerta donde se plantaban o sembraban lechugas, tomates, pimientos, alubias, garbanzos, lentejas, etc., legumbres estas últimas que se consumían a diario, normalmente como plato único. En el momento en que se hacía una comida extra el suministro de carne estaba resuelto sin gastar un duro, al poseer animales de corral, tales como cerdos, gallinas y conejos. El cuco es un ave migradora que cría en Eurasia y el norte de África, y pasa el invierno en el África subsahariana y en el sudeste asiático.

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