La gallina posee más de 4.000 óvulos microscópicos y solo una achicada una parte de ellos se lleva a cabo para constituir la yema, pero si no hay gallo, no es posible la fecundación de los huevos. Es lo que pasa en las huertas dedicadas a la producción de huevos, donde solo hay gallinas y ningún gallo. Como es sabido, las gallinas realizan una ovulación casi día tras día, con lo que ponen huevos independientemente de que sean fecundados o no.
No solo fundamentada en pienso sino también en verduras, vermes de la harina entre otras cosas que le podamos aportar a fin de que generen huevos de calidad. También podemos ponerles restos de cocina, hierbas adventicias que nos salgan en la huerta o restos de cosecha. Una de las opciones mucho más utilizadas a fin de que la gallina deje de estar clueca es sacarla del gallinero y ponerla en libertad durante el día, hasta que pierda el hábito de incubar. Las gallinas cluecas cogen la manía de ir siempre y en todo momento al mismo nido a incubar, si se lo bloqueamos o quitamos, probablemente la gallina abandone sus malas costumbres. Naturalmente, a esta puesta descomedida también influyen otros factores humanos, como el suministro periódico de pienso y la luz artificial en los gallineros.
El humano propició que las especificaciones de producción fuesen más relevantes en su linaje, lo que logró la puesta incesante de huevos en esta especie. Las gallinas son aves en especial atrayente en lo que debe ver con la periodicidad y el modo perfecto en que ponen sus huevos. Como particularidad, este animal pone huevos con independencia de que haya sido fecundado o no. Esto debe ver con que los huevos son el resultado de la ovulación de las gallinas y esta tiene lugar prácticamente todos los días.
El motivo por el que las gallinas ponen huevos cada 24 a 26 horas es porque los ciclos se superponen. Este incesante y complejo proceso de adentro tiene una vida de un par de años; es lo que se considera el tiempo o ‘vida útil’ de las gallinas ponedoras. En cambio, si lo que quieres es tener pollos, obviamente precisarás un papá. En las huertas de producción de huevos solo hay gallinas ponedoras y no hay gallos, con lo que los huevos que se comercializan no están fecundados y, por consiguiente, no se tienen la posibilidad de incubar para que nazcan pollitos.
El agobio puede afectar a las gallinas de tal modo que reducirá la calidad y el número de huevos que ponen, hasta aun no poner ninguno. Es por ello esencial determinar el aspecto por el que las gallinas no se sienten a gusto en el gallinero y también intentar corregirlo. Cuando la gallina pone el huevo fertilizado, comienza con la fase de incubación. La gallina se encargará con mucha atención de cuidar a sus huevos y no se separará para nada de ellos. Los empollará con su cuerpo para proporcionarles todo el calor que necesitan para formarse.
Las curacas o mosquiteros, por poner un ejemplo, incuban una sola vez, por el hecho de que alimentan a sus polluelos con variedades especiales de orugas que unicamente se dan una vez al año. GalloEn el siguiente paso, el gallo se va a subir al dorso de la gallina y abrirá las plumas de la cola para conectar las cloacas de los dos y poner en la de la hembra su saco de esperma. En el momento en que este último paso se ha realizado, los 2 animales se apartan y el gallo comienza la búsqueda del siguiente ejemplar a fecundar. Dos gallinas sentadas sobre huevos dentro del gallinero Eglu Classic. La sección primera del oviducto es donde se añade la clara de huevo (albúmina).
Las aves silvestres como los tordos o los gansos salvajes, por ejemplo, ponen un huevo solo si existen condiciones adecuadas para criar a la prole. Evidentemente, la manera de reproducción de las gallinas es ovípara. La fertilización la realiza el gallo de manera interna y después debe de generarse la incubación de los huevos. Es decir, para que las gallinas se reproduzcan debe haber un gallo.
Nosotros únicamente contamos con gallinas en nuestras huertas por lo que, al no haber gallo, no se puede producir la fecundación. En consecuencia, es imposible que de los huevos camperos de nuestras gallinitas nazcan pollos. Los huevos artificiales semejan reales, los puedes utilizar para mentir a una gallina para animarla a la clueca. Por una parte, se tiene a las gallinas cautivas con las luces encendidas las 24 h. Así, el organismo piensa que siempre es de día y libera incesantemente los folículos.
«Esto supondría un agobio para las aves, aparte de un despilfarro de energía», indican. Estas hembras nacen con cerca de 4000 folículos o futuros óvulos en su ovario izquierdo. Desde los cuatro a seis meses, empiezan su ciclo ovulatorio; los ciclos hormonales de las gallinas duran diez semanas. De ahí que, comunmente, una gallina pone huevos hasta el momento en que el nido está lleno, una media de entre diez y 12.
