Troceamos en lonchas para adornar el plato. El punto clave de la receta está en los huevos.
Cocinamos en una cazuela grande con abundante aceite a 110 ºC más o menos, deben salir burbujas pero medianas y enormes y muy despacio. En Asturias, para ser más preciso en un espacio llamado Anieves , en la zona rural de Oviedo.
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En esta web quiero comunicar contigo toda mi experiencia, para que disfrutes de la cocina tanto como yo y todos tus platos salgan de rechupete. Ponemos una parte del aceite que nos ha sobrado en una sartén y freímos los huevos al gusto.
Cocinar a fuego medio hasta que estén agradables y en ese instante subir el fuego al máximo para conseguir que se doren. En una sartén extensa o cazuela ponemos el aceite, aceite de oliva virgen o virgen extra, y para freír mejor de la pluralidad picual. En el momento en que el aceite esté bien caliente, freír las patatas adjuntado con los ajos.
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Agregamos a exactamente la misma sartén 1 cucharada de aceite de las patatas y freímos los huevos sin que terminen de cuajarse. No tienen que quedar muy hechos (la yema debe quedar líquida). Pelamos las patatas, las lavamos en agua fría y las cortamos en rodajas de medio centímetro, o sea, patatas panaderas.
Cortamos las patatas a nuestro gusto y las lavamos con abundante agua hasta que salga cristalina, escurrimos y secamos lo mejor posible. Ahora de mozuelo despuntaba en las artes culinarias atrayendo la atención en los círculos gastronómicos.
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Los huevos rotos con jamónes una receta fácil de llevar a cabo con un resultado increíble y que gusta a todos, en mi casa si fuera por ellos, los comerían todos y cada uno de los días. En resumen, para elaborar unos huevos rotos con jamón de categoría, recuerda siempre respetar la proporción de huevo y patatas, a fin de que estas últimas logren impregnarse bien del huevo.
La tercera clave para obtener unos huevos rotos con jamón de gran lujo es la calidad de este último ingrediente. Si bien, siempre vas a poder ponerle un jamón serrano corriente, en un caso así sí que se aprecia cuando lleva un buen jamón, como por poner un ejemplo un jamón ibérico de El Pozo Legado seguramente triunfas. Usaremos una sartén antiadherente y parte del aceite en el que hemos frito las patatas.
Nací en pleno vecindario de La Isla, en Las Palmas de Gran Canaria. Aprendí a desenvolverme en la cocina gracias a mi madre y, de manera especial, a mi abuela, de la que aprendí trucos y recetas. Transcurrido un tiempo he ido creando ciertas novedosas y adaptando otras. Bajamos el fuego y salpimentamos, removemos con una cuchara de madera a lo largo de unos 5 minutos y añadimos 1 cucharada de miel.
En primer lugar freímos las patatas en una freídora o en una sartén con abundante aceite de oliva. Colocar las patatas en el plato de servir y disponer por arriba los huevos y las lonchas de jamón.
Las Mejores Recetas
También las podéis recortar en tiras, el resultado es similar si bien menos vistoso a la hora de presentar el plato. Secamos las patatas con papel absorbente de cocina y reservamos. Un plato tan humilde que no sale en ninguno de los grandes libros barrocos de cocina cortesana.
La vamos a poner a calentar, fuego fuerte y cuando esté el aceite muy ardiente cascamos el huevo en la sartén. Bajamos el fuego y cocinamos al gusto, para mi lo ideal es que queden con una rápida puntilla pero con la yema bien tierna, a fin de que entonces tengamos la posibilidad mezclarla bien con las patatas. Aunque se emplatan enteros, el instante crucial es en el momento en que ya en la mesa cortamos los huevos y mezclamos con las patatas y el jamón, de ahí el nombre de huevos estrellados o huevos rotos con jamón.
