Otra de las respuestas corporales que suele venir acompañada de la piel de gallina también son los escalofríos, una reacción fisiológica que da una sensación de frío a todo el cuerpo. En un corto plazo, provoca que el pelo se erice y se muestre la piel de gallina; a largo plazo, parece fomentar el desarrollo del vello. Los investigadores sostienen que es un considerable vínculo entre las células madre, que el cuerpo puede usar para crear otros géneros de células, y los estímulos externos. A corto plazo, provoca que el pelo se erice y aparezca la piel de gallina; en un largo plazo, parece fomentar el crecimiento del pelo. Según los científicos, esta reacción es primordial para conseguir la regeneración de los tejidos dependiendo del entorno, como los cambios de temperatura bruscos de calor y frío. “La piel de gallina es una manera rápida de proveer algún tipo de alivio a corto plazo.
No tenemos ningún tipo de control de ellos, así que indudablemente pasan muy inadvertidos para la mayor parte. En el momento en que hace frío se contraen los músculos erectores -por ello se le llama pieloerección- y el pelo se eriza, creando una minúscula cubierta de aire cerca de nuestra piel que la resguarda de la bajada de temperaturas. Este reflejo de nuestro cuerpo es lo que nos ofrece esa apariencia de piel de gallina.
Pero cuando el frío dura, esto se transforma en un buen mecanismo para que las células madre sepan que quizás es hora de regenerar el nuevo pelaje «, detalla Hsu. Todos y cada uno de los vellos del cuerpo humano tienen en su base un músculo erector. La piel de gallina y piloerección se produce porque esta musculatura tiene una respuesta inquieta apuntada al sistema central. A causa de esta respuesta, los músculos erectores se contraen y hacen que se levanten cada uno de los pelos del cuerpo. Mientras que este proceso ocurre, los poros se dilatan, haciendo que la sensación de piel de gallina parezca mucho más alucinante.
De ahí que, si hace aparición piel de gallina asociada a calambres musculares, cefalea y abdominal, confusión, náuseas o desorientación es muy probable que se intente un golpe de calor. Más allá de defendernos del frío, lo cierto es que en los humanos de hoy día la piloerección tiene poco sentido, así que podríamos decir que es un ‘recordatorio’ de nuestro pasado como unos mamíferos que habitaban en un mundo lleno de riesgos de los que había que protegerse. También lleva por nombre de este modo a la keratosis que es la acumulación de keratina en los folículos del pelo en forma de protuberancias.
La piel de gallina se genera por estímulos como el frío o una emoción. La piel de gallina se produce por la liberación de adrenalina, que se segrega en situaciones de frío y asimismo de estrés. Esta hormona genera una secuencia de reacciones en todo nuestro cuerpo y lo pone en alarma a fin de que logre luchar o escapar si está en peligro. Asimismo es la encargada de que, de pronto, nuestra fuerza aumente o nuestra aptitud mental de respuesta sea más ágil. De ahí, que asimismo nos salga cuando oímos música, nos emocionemos o tengamos miedo. «La adrenalina es la responsable de esta reacción», explica Bubenik.
Esta h ormona la generan 2 pequeñas glándulas con forma de judia que se ubican sobre los riñones cuando nos enfrentamos a una situación que nos produce tensión. Además de ponernos la piel de gallina, la adrenalina se asocia a la aceleración del ritmo cardíaco, un aumento de la presión sanguínea, temblores corporales o sudoración de las manos. Aparte de eso, el equipo estableció que el músculo era en efecto un vínculo fundamental entre los nervios y las células madre de los folículos (en el momento en que el músculo fue removido, la conexión se perdió).
Hay veces en las que semeja que tenemos la piel de gallina de manera incesante pues la piel de cerca del pelo es muy aparente, pero en realidad no es de esta forma. Esto se conoce con el nombre de queratosis pilaris, una afección benigna exclusivamente cutánea, que hay que a una acumulación de queratina y no tiene nada que ver con el mecanismo de defensa del que hablamos, pues el pelo no se eriza. Con esta reacción corporal, el organismo pretende incrementar el volumen de aire entre el exterior y el interior del cuerpo para aislarlo del frío inmediatamente. Además, como un vestigio evolutivo de nuestra clase, la piel de gallina eriza el pelo, lo que quiere decir que ante emociones muy intensas como el temor o la agresividad, al levantarse el pelo corporal, el individuo desea enseñar una mayor intimidación y ferocidad. Cuando la temperatura exterior es baja el vello capilar se eriza. Ocurre en toda la área pilosa, salvo aquella que cubre los genitales, las manos o los pies.
Por este motivo, la piel de gallina puede manifestarse en muchas ocasiones en las que las conmuevas están presentes, ya sea por una amenaza real o por oír una canción, ver una película, leer un libro o sencillamente con pensar. La «piel de gallina» pertenece a aquello que nos queda de animales. Así sea porque contamos temor, se nos acerca un individuo que nos atrae o oímos una canción que nos conmueve. La «piloerección», como se conoce en el campo médico, es un vestigio evolutivo que recuerda a la piel de las aves en el momento en que las despluman. Según explica el psicólogo y zoólogo de la Universidad de Guelph, George A.Bubenik en la gaceta «Scientific American» heredamos la piel de gallina de nuestros ancentros como reacción a situaciones que nos causan emociones extremas. Un momento de agobio, un susto de un amigo o ver una película de miedo muy terrorífica tienen la posibilidad de lograr que tu pelo se erice.
La piel también puede cambiar de textura si algo nos emociona, como una dedicatoria bonita, tocar una pizarra o rayar el cuchillo con un plato. Ver a alguien que disfrutas o excitarte sexualmente puede provocarte piloerección, de la misma estar a bajas temperaturas sin la ropa adecuada. Cualquier piel precisa hidratación para sostenerse sana y bonita, y en la situacion de la queratosis, que suele estar asociada a la sequedad y a la dermatitis, aún más. Las cremas mucho más recomendadas en este caso son las que poseen urea, que aparte de humectar previenen la queratosis, y las indicadas en caso de piel seca, que contengan vitamina Y también, aceites, glicerina, vaselina, lanolina, etcétera. También se recomiendan las cremas con vitamina A o sus derivados .
