Informaban también las monjas de que no existía ninguna oración ad hoc, con artículo establecido por la Orden que aludiera al buen tiempo. Aseguraban las religiosas que, en esencia, sus plegarias iban dirigidas a que se cumpliesen los deseos de sus benefactores y, si el tiempo que se encargaba era para una boda, asimismo encomendaban a Santa Clara la alegría y la fidelidad de los contrayentes. Isaura Marcos Sánchez es integrante de la red social de clarisas del monasterio de Santa María de Pedralbes de Barcelona desde el año 1976. Su afición por la fotografía nos deja en este momento gozar de unas instantáneas que nos adentran en el tema de la ofrenda de huevos a Santa Clara desde una perspectiva muy creativa.
Esta tradición puede considerarse un ejemplo evidente de de qué manera la Meteorología, antes de ser Ciencia, había predeterminado un sistema para garantizar ambientes atmosféricos agradables en entre las fechas más esenciales de la vida humana, el día de esponsales. Las bodas, anteriormente se festejaban fuera de la iglesia, al aire libre, en el atrio del edificio, por lo que tener tiempo grato era muy deseable. Además, la existencia de eventos meteorológicos extraños a eso que se consideraba buen tiempo estaban penados con una horrible carga supersticiosa. “Comparto en Las Fotografías de los Lectores de La Vanguardia estas fotografías creativas de reflejos sobre la ofrenda de huevos a Santa Clara por el buen tiempo, tradición popular muy popularizada por todo el planeta”, resalta la autora de las instantáneas.
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En los monasterios de Salvatierra, Molina de Aragón, Borja y Ciudadela detallaron de que no existía la tradición como tal en su región, si bien algunas veces recibían ofrendas de huevos de personas que no radicaban habitualmente en la ciudad. De todos modos, el muestreo efectuado puede considerarse como un muestreo de conjuntos, ya que el cuestionario incluía ciertos apartados en que, para responderlos, la abadesa debía consultar a otras religiosas de su comunidad. La base primordial de datos la constituyeron las respuestas de los 35 cuestionarios cubiertos en los monasterios clarianos de las localidades citadas en la nota final. Al sucederse las generaciones en el correr de los tiempos, las prácticas y tradiciones meteorológicas fueron desapareciendo o han evolucionado tanto, que prácticamente nos resultan irreconocibles.
Es una exclusiva generación de jóvenes clarisas franciscanas que no asume la tradición meteorológica aneja a las ofrendas de huevos para conseguir buen tiempo. Admiten y agradecen los huevos como “obsequio” porque –dicen- “les vienen realmente bien”. No se interesan por el motivo del “obsequio” ni de quién lo hace, ni para qué acontecimientos pretende quien transporta los huevos “que ellas recen”. Afirman concluyentemente que “la tradición de la ofrenda no es consustancial a la Regla de Santa Clara”.
Una Bonita Tradición: Llevar Huevos A Santa Clara
Un ritual que se remonta a la Edad Media y que tiene cierta relación con la meteorología. Esto sí lo modificaron los tiempos, en este momento son las amigas solteras las que deben realizar la ofrenda a las clarisas a fin de que recen por el buen tiempo el día la boda, acompañados de una nota donde se señala la fecha y hora de la liturgia matrimonial y el nombre de los contrayentes. De este modo sucede en España desde la Edad Media aunque no se sabe el auténtico origen de esta tradición.
También se pide el buen tiempo para bautizos y primeras comuniones. Ciertas tradiciones desaparecen y otras se mantienen con el testigo de las nuevas generaciones. En Almería no somos menos y, tanto como nos atrae mantener las migas los días de lluvia, nos encanta continuar conservando costumbres con siglos de historia. Es la situacion de las ofrendas que realizan las futuras novias a las clarisas para que no llueva en el día de su boda; llevando huevos al convento de Santa Clara en Almería.
Las ofrendas de solo doce huevos de que hablaba Omaechevarría en el año 1970, únicamente se realizaban en tres o cuatro conventos del País Vasco y Andalucía. De los sesenta conventos con los que se conectó para efectuar el estudio en 1993, únicamente tres de ellos – los de Vinaroz, Murcia y Almería- eran ajenos a la tradición. La climatología poco lluviosa de sus emplazamientos mediterráneos justifica, en parte, su falta, estimando que antiguamente las ofrendas de huevos se hacían exclusivamente para que no lloviera el día de la boda.
Para aproximarnos a esta tradición hemos acompañado a Estefanía Muñoz, quien celebrará su enlace matrimonial este sábado 18 de septiembre en la ciudad de Adra. Tras una semana de intervalos lluviosos, Estefanía se teme que llueva el día de su boda y por ello asistió al Monasterio y dio como ofrenda dos docenas huevos a Santa Clara. Fue ella la primera mujer que, bajo los estatutos de San Francisco, creó una regla monástica en la Edad Media. Además de ser patrona reconocida de diversos sectores, es considerada patrona del bien tiempo, mediante esta tradición que, si bien su origen se desconoce, todavía es practicada por miles de novias preparan el más destacable día de sus vidas.
Inspiración día tras día para novias y novios que buscan consejos y también ideas para organizar una boda diferente, personal y llevada a cabo desde el corazón. Si quieres recibir más consejos y también ideas para tu boda y no perderte ninguna de las noticias de Lluvia de ArrozSUSCRÍBETE AL BLOG, además de esto, al inscribirte recibirás “el calendario de vuestra boda”, con todos los pasos que debéis continuar en el momento de organizar vuestra boda perfecta. En otro de los monasterios, Santillana del Mar, están emplazados el Museo y el Fichero Diocesanos, con documentación eclesial muy vinculada a la historia del tiempo, Hay registros de celebración de rogativas, efemérides desastrosas, libros parroquiales, Diezmos, tazmías, etcétera … En los tres monasterios cantabrios no sólo conservan la tradición de que venimos hablando, sino que la promueven en la medida de sus posibilidades.
El 14 de febrero de 1958, Pío XII la proclamó Patrona de la Televisión. Santa Clara está muy metida en la entraña del pueblo, quien la considera patrona del buen tiempo. Es un patronazgo folclórico, por sus habituales ofrendas de huevos, cuyo origen se desconoce. Señal indudable de la veneración que suscitó, en España y en el planeta, son la multitud de islas, cabos, promontorios, lagos, ciudades, barrios, plazas, calles, centros de enseñanza, capillas costeras, museos, monasterios…
Tu Boda Conmigo
Con los años la tradición fue evolucionando y muchas familias empezaron a sugerir no solo una docena, sino más bien hasta 3 o 4 docenas de huevos, incluso hay quienes dicen que hay que llevar 13 huevos. En relación a quién tiene que ser el encargado de prestar los huevos hay varias versiones, unos dicen que nuestra novia y otros que las amigas. En Cataluña se había iniciado una exclusiva ofrenda que no debía ver transcurrido un tiempo atmosférico. Era la de las niñas que llevan el nombre de Clara y que se presentaban a la Santa en cualquiera de sus monasterios, portando un cestillo con huevos.
En 1212, tras haber oído predicar a Francisco de Asís su palabra, fundó la Orden de las Clarisas o Damas pobres. Dejó sus permisos y riquezas atrás para continuar el camino de la pobreza, con la ilusión de conseguir un mundo mejor bajo el lema ‘Paz y bien’. Apúntate a nuestra newsletter y atrévete, alén de tendencias y tradiciones, a soñar tu boda. De esta manera de bonita es la tradición de llevar huevos a Santa Clara para el buen tiempo en la boda, con un packagingideal de Project Party Studio.
