Para aclararlo es esencial antes entender cómo se forma un huevo. Un óvulo absolutamente formado abandona el ovario y se deposita en el oviducto, la parte del sistema reproductivo de la gallina por los que pasa la yema en su camino hacia afuera.
Algunos huevos cobrizos parecen tener un tono anaranjado gracias a la intensidad del color. Por poner un ejemplo, una gallina joven puede poner unos huevos más oscuros que una gallina más vieja. Algunas etnias ponen huevos de colores claros que pueden verse rosados, mientras que otras desarrollan huevos oscuros como el chocolate. El color del huevo cambian en función de la raza de la propia gallina, puesto que las Leghorn ponen huevos blancos y las Rhode Island Red huevos marrones.
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Las Auténticas Diferencias Entre Los Huevos Blancos Y Los Marrones
Mientras, las pequeñas producciones caseras que iban sobreviviendo sostuvieron las razas autóctonas, que en España tienden a ser de plumaje obscuro y, por consiguiente, ponedoras de huevos morenos. Hace unos años se creía que los huevos azules eran mucho más saludables, pues no presentaban colesterol. No obstante, múltiples investigaciones recientes defienden que el colesterol que muestra el huevo no es perjudicial para la salud, tal es así que puede consumirse más de manera regular de lo que se pensaba.
Este contenido está efectuado por un anunciante y no interfiere en la información de eldiario.es. Huevos blancos y marrones se distinguen, de todos modos, tan solo en el color. Es decir, salió dando por hecho que los huevos morenos eran los únicos “de corral” y criados comúnmente.
Exactamente En Qué Se Diferencia Un Huevo Blanco De Un Huevo Marrón
La cantidad de calcio asimismo afecta al espesor; algunas etnias de gallinas pueden depositar calcio a un ritmo más rápido que otras. Indudablemente, de las mejores gallinas ponedoras de huevos blancos es la Leghorn.
Por su parte, los huevos cuyo código comience por 1 corresponden a gallinas camperas, criadas en libertad y con una alimentación ecológica en un porcentaje inferior al 80 por ciento. Los huevos 2 corresponden a gallinas de suelo que viven en naves o en gallineros y que se alimentan de pienso, sin salir al exterior.
El color del plumaje tiene, por consiguiente, poquísimo que ver con el buen sabor o calidad del huevo, y sí el procedimiento de cuidado de las aves. Por eso nos extraña que los huevos blancos hayan “desaparecido del mapa”. De media, una gallina pone entre 300 y 325 huevos por año, en concreto puede desarrollar un huevo en solo 24 horas. Una vez puesto, en solo media hora puede comenzar a gestar otro.
Pero, en todos los casos, si se abre un huevo, se va a ver que la cáscara de la parte interior es blanca. El color, pese a eso que suele pensarse, no tiene nada que ver con la calidad ni con el contenido nutricional ni con el gusto.
Uno de los principales determinantes del color de la yema es el contenido de xantofilas en la dieta. Para finalizar, en cuanto a la nutrición y forma de cría de las gallinas, asimismo podemos encontrar una clasificación fundamental.
Lo que sí es es cierto que los huevos de gallinas cobrizos suelen ser de mayor tamaño, y el tamaño sí influye en los puntos alimenticias del huevo. Prácticamente al final del proceso, ciertas gallinas liberan un pigmento que colorea la cáscara. Este pigmento se llama ovoporfirina e influyen en el color, en un caso así, las mucha cantidad de protoporfirina dan como resultado huevos marrones. Este pigmento está ligado a la raza de la gallina (no a su alimentación) y se depositan las dos últimas horas de la capacitación del huevo.
Otro de los «mitos» erróneamente difundidos sobre huevos blancos y huevos marrones afirma que estos últimos tienen la cáscara considerablemente más dura y fuerte . Este aspecto tiene que ver más bien con la edad de la gallina que haya puesto el huevo en cuestión, tanto en la situacion delos blancos como en el de los cobrizos. Las jóvenes alcanzan huevos con la cáscara mucho más fuerte, al tiempo que los de gallinas adultas tienden a tener una capa considerablemente más frágil. Es un detalle que puedes haber advertido en cualquier plaza de mercado, en una superficie comercial o sencillamente en la despensa de tu casa.
La temperatura ambiental juega un papel esencial asimismo en la calidad de la cáscara en tanto que, a temperaturas más altas, se disminuye la ingesta de alimento y de calcio. Por tanto, la gallina no genera suficiente calcio para conformar, de manera correcta, la cáscara del huevo.
