El agua que hemos calentado, ya va a estar hirviendo. Cascar y añadir el huevo, en 3 minutos ahora estará escalfado. Cubrimos el fondo del plato con los brotes tiernos.
El instante en el que cortas la yema del huevo y cae por el panificado es un instante de disfrute máximo. En un cazo, a fuego suavísima, fundir la mantequilla.
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Colocamos cada uno en el interior de un cuenco y también introducimos los huevos en su interior. Juntamos las esquinas del papel film procurando que no quede aire dentro suyo.
Digamos que es una especie de mahonesa mucho más fuerte puesto que transporta mantequilla en lugar de aceite. Su ingredientes principal es la salsa holandesa y el huevo acompañado de embutido a la plancha, puede ser bacon o jamón y siempre y en todo momento sobre una tosta de muffin inglés. Sé que va a ser difícil conseguir los muffins ingleses pero podéis buscar algunos panecitos jugosos en el autoservicio que valdrá igualmente.
Huevos Benedictinos, La Receta Original
Movemos el brazo de la batidora solo en el momento en que la salsa emulsione, para evitar que se corte. Mantenemos la salsa de holanda templada en un bol al baño maría.
Retira y aderézalas con algo de pimienta y adórnalas con unas hojas de perejil. Fríe las lonchas de jamón de 3 en tres en exactamente la misma sartén.
Es lo que necesitamos para nuestra salsa holandesa. Añadir las yemas de huevo, el zumo de limón, la pimienta blanca o la cayena, la sal y la mostaza y combinar a velocidad alta durante unos 15 segundos.
Te recomendamos que la pruebes, seguro que repites pues te va a encantar. Según la Wikipedia, no está clarísimo el origen de este plato, pues han sido bastantes los que en todo el pasado siglo se atribuyeron la idea de este plato.
Es un plato que se suele comer en el desayuno o brunch. Retiramos los huevos del agua y los movemos a un envase con agua helada para cortar la cocción. Retiramos los huevos del papel largometraje, poner sobre los panecitos con el salmón y napar con salsa de holanda. Espolvorear con un poco de cebollino fresco picado y pimienta negra .
Unta las rebanadas de pan con un poco de salsa holandesa y coloca tres lonchas de jamón sobre cada tostada. El paso inicial es aclarar la mantequilla, esto es separar su parte grasa, que es cerca del 80%, del agua que tiene dentro. Para la salsa de holanda empleamos solo la parte grasa.
No obstante los productos recomendados responden a una decisión de criterio del aparato de Pequerecetas, no estando ningún atractivo por la parte de las marcas. Dejamos que se cocinen en el agua a lo largo de 3 minutos.
Oscar Tschirky, el maître del hotel, tras ver la mezcla pedida por su cliente, decidió ofrecer en el menú la mezcla imaginada por Benedict. Esta es un receta abreviada que hace menos afanosa la elaboración de los huevos Benedictine. La salsa holandesa lista con este método no frecuenta cortarse y resulta muy buena.