Entonces, si los huevos no están singularmente sucios o con caca de gallina por todos lados, solo dales sutilmente con un harapo seco de tela o papel, lo que deja la cutícula íntegra. Si se manipulan de la manera correcta, los huevos pueden ser un alimento de alta calidad sobre nutrición y muy aconsejable. Sin embargo, según el organismo, hablamos de entre los alimentos de procedencia animal con mejor proporción de grasa. Además, salvo la vitamina C, el huevo tiene dentro todas las que el ser humano precisa. Las bacterias patógenas que contaminan los huevos pueden hallarse tanto en el interior como en su cáscara. Cuando las gallinas ponen huevos, estos van mediante la cloaca, que es una cavidad ubicada en la parte final del tracto digestivo, por la que también van las heces.
El Departamento de Agricultura estadounidense advierte de que lavar la cáscara del huevo puede ocasionar el arrastre de algunas de sus capas protectoras. Así, los agentes que continúan en la cáscara pueden introducirse en el interior. Las cuestiones de inseguridad alimenticia que rigen la producción y la venta de huevos en España vienen dadas por la Unión Europea.
Jamás está sugerido lavar los huevos solo con agua sin utilizar desinfectante ni detergente. En Suecia es justo al contrario y por tradición los huevos se venden lavados. Los países de la UE que lavan los huevos prosiguen una normativa concreta de lavado de huevos sujetos a autorización anterior y a una app minuciosamente dominada. Los huevos, por tanto, tiene las suficientes barreras naturales para preservar su interior intacto. De hecho, remojarlos puede acrecentar las posibilidades de contaminar el interior.
En las gallinas “de casa” no se acostumbran a agarrar los huevos justo después de la puesta, así que acostumbran a estar considerablemente más sucios que los comerciales . De ahí que son los que preocupan especialmente y los que muchas personas lava antes de meterlos en el frigorífico. Y mucho menos si se emplean substancias como vinagre, detergente, jabón o lejía, que pueden dañar el huevo o suponer un peligro para la salud. Por otra parte, la OCU no recomienda lavar con agua las setas pues pierden bastante gusto y aroma. Tampoco las verduras en bolsa pues, así como comentan desde la organización, ahora suelen lavarse con algún desinfectante en pequeñas dosis. No solo para mantener sus características, sino para evitar una viable infección.
Tanto las granjas como las industrias son revisadas por especialistas y se comprueba el estado de las gallinas cada cierto tiempo. Además, según la Organización Interprofesional del Huevo y sus Artículos , las gallinas ponedoras son vacunadas «contra las primordiales patologías que logren afectarlas», siendo una de ellas la salmonelosis. Como ahora sabemos, el huevo está formado por una cáscara que resguarda el interior, donde están la clara y la yema. Solamente puede verse a fácil vista, pero esa cáscara está llena de pequeños poros, que dejan el trueque de gases entre el interior y el exterior. Por medio de ellos van dióxido de carbono y vapor, y entra oxígeno.
Compete entonces a los científicos, con datos y estudios concretos, el determinar cuáles son los sistemas mucho más eficaces para mantener la salud de los consumidores. Entre las recomendaciones mucho más importantes para evitar intoxicaciones alimentarias y eliminar posibles microorganismos patógenos, así como elementos químicos, se encuentra la higiene y desinfección de los alimentos. Sin embargo, existen algunos alimentos, como el huevo, para los que se desaconseja de manera expresa su lavado. Los huevos, tras su lavado, muestran los menores escenarios de polución por enterobacterias. Esto no piensa un inconveniente en el huevo, en tanto que las condiciones son totalmente aeróbicas. Hoy en día el desarrollo de lavado de huevos se ha automatizado hasta el punto que, de forma directa on line y mediante lavadores que utilizan resoluciones de agua caliente con limpiadores y desinfectantes, se hace sin prácticamente intervención humana.
Si no, es conveniente introducir el envase terminado en la parte más inferior para evitar que las bacterias caigan sobre el resto de alimentos. El primordial problema es que no alcanza ni desinfecta la integridad de la área de la cáscara. De ahí que no puede garantizarse que los huevos se venden sin Salmonella u otras bacterias. De ahí que no encontramos que ningún envase de huevos indique que se ha empleado luz UV, exactamente de ahí que, porque puede crear una falsa sensación de seguridad al cliente. Si los huevos están fríos, agua fría, si están calientes, agua caliente. Si es invierno y deseas usar agua caliente, déjalos en la cocina un rato hasta que cojan temperatura ámbito.
Hasta un 60% de las personas que lo hacen al revés conservan restos de Salmonella typhimurium en sus manos incluso tras lavárselas. Por eso los huevos se almacenan y transportan a una temperatura ámbito y no se recomienda refrigerarlos hasta el momento en que llegan al consumidor final. El consumidor puede optar por guardar los huevos en la nevera a temperatura de refrigeración si lo quiere. Pero debe tener en cuenta siempre y cuando en ese caso de hacerlo, va a deber mantenerlos siempre y en todo momento refrigerados hasta el día de hoy de su empleo, asegurándose de que se mantiene la cadena de frío.
Hasta un 30% de las personas contaminan la ensalada cuando no lo hacen de este modo. En España, lo máximo que permitimos y que sí es muy recurrente es que los huevos pasen por por una cinta transportadora bajo una lámpara de luz ultravioleta. Aunque es un fenómeno poco frecuente, en ocasiones podemos encontrar huevos con dos yemas. Si fueran huevos fecundados, lo habitual es que entre los 2 pollos no se desarrolle. Nombre Mail Web Guarda mi nombre, e-mail y web en este navegador para la próxima vez que comente.
