Mick Jagger Bailando Como Gallina

Los hermanos Butabi, Will Ferrell y Chris Kattan , tratando de vencer en la movida nocturna de Los Angeles para llegar a convertirse en personas importantes y de esta forma tener su club. Cuando un accidente del destino les abre las puertas del Roxbury (el club mucho más selecto, elitista y ultramoderno de la región), ellos tratan de abrirse sendero con su natural encanto y sus bailes y ritmos discotequeros… Buen rollo, música que invita a bailar, parejas despilfarrando formas para el swing, y una Madonna probando su utilidad para el espectáculo… Pasos de baile al ritmo instrumental de «Puttin\’ On the Ritz» de Irving Berlin, protagonizados por Dr. Frederick Frankenstein y The Monster , subidos al entablado de un ámbito, vestidos de frac para la ocasión, y ayudados de sus respectivos bastones y sombreros de copas. Curiosa y inolvidable escena merced al mago Tim Burton, una posesión de por medio, todos bailando cerca de la mesa, con una canción bastante que se pega…

Un concierto que es un acontecimiento histórico, por cuanto va a ser el primer concierto gratis que los Rolling Stones hacen desde 1969, se preveé una asistencia próxima al millón de espectadores y va a marcar, sin ningún género de dudas, un antes y un después en la historia cultural de Cuba. «Mick Jagger no sabe cantar, incluso Ringo lo realiza mejor que él», sentenció un seguidor incondicional de Ringo Starr en 1965. Le ha costado a Jagger mucho más de 50 años admitir que, para bien y para mal y por mucho que buenamente lo intente, sin su viejo colega Keith jamás va a llegar muy lejos. «Chicago fue alucinante, quedarnos en la mansión y todo eso, me agradó. Hefner fue buena gente con nosotros. Me llevaría horas contarte todas y cada una de las locuras que ocurrieron allí».

Y desde luego, nadie en Cuba está pensando en que vuelva a implantarse un capitalismo como el que históricamente ha mantenido a America Latina en el subdesarrollo y el neocolonialismo. El cubano medio es crítico con aquellos aspectos de la Revolución que no marchan bien, y lo expresa libre y precisamente, pero no se plantea de ninguna manera abandonar todo cuanto la Revolución significa. La banda se reune al finalizar este “Satisfaction” y saluda al público desde el centro del escenario. De nuevo, los Stones me han hecho vivir un instante que no voy a olvidar jamás. Sin darse ni un segundo de respiro, esta joya del Exile On Main Street de 1972 es la tercera en sonar, igual que las otras 2 a un ritmo vibrante. Suena compacta, fuerte, los coros de voz revisten la canción de una hermosura sin precedentes y en este asunto la banda se muestra sólida como una roca.

El líder de los Rolling Stones, Mick Jagger, semeja recuperado de la operación de corazón a la que fue sometido el pasado abril al colgar en su cuenta de la red social Twitter un vídeo en el que se le ve saltando y bailando. Y Kyle al ámbito, primero tratando de emitir al conjunto que baila, y después, ya a solas, tratando de mostrar una versión totalmente nueva, y además de esto, exponiendo ese cuerpo nacido para el baile… Usher Terrence «Terry» Raymond IV, más conocido como Usher (cantante, compositor, bailarín, productor de música y actor estadounidense).

Dejando de lado que su música sería mezclable (como con tantos otros actualmente, por otra parte), los dos lucen una apariencia afín —con una musculatura cincelada en piedra que lúcida pasiones entre sus fans— y tienen también una manera de bailar bastante parecida, con movimientos explosivos y robóticos. La mejora de las relaciones con Estados Unidos, al menos por un instante, el viable alzamiento del bloqueo y con ello, la optimización del poder adquisitivo general de la población, que es el problema que mucho más preocupa a los cubanos, no parece una quimera ni es percibido de esta forma por el pueblo cubano. Existe incertidumbre sobre el futuro, pero también mucha ilusión.

Su presencia icónica en el ámbito mezclada con unas animaciones de vídeo en las pantallas laterales y la frontal principal acompañaba las canciones del repertorio, introduciendo sus clásicos éxitos y en especial «Rocket Man», que logró vibrar al público. Festejando la da un giro mundial llamada «Sixty», que es el tiempo que lleva la banda en la carretera, deleitaron a un público de todas y cada una de las edades y generaciones, congregando cerca de sesenta mil almas para verles en su salsa. El artista nos recordó precisamente que lleva 60 años desde que formaron el grupo en 1962, dedicando esta velada mágica al desgraciadamente fallecido Charlie Watts, un homenaje donde se pudieron ver imágenes en las pantallas del batería alrededor del ámbito. Durante ámbas horas que tocaron se pudo revisar de nuevo que, pese a cumplir pronto los 79 años, Mick Jagger todavía se mueve y recorre todo el escenario de qué manera sí fuese un adolescente, como si le hubieran puesto las pilas de Duracell del conejo. Pasmante derroche de energía y kilometraje físico. La banda le echa ganas, la gente se vuelva desquiciada con la canción, pero el sonido en esta ocasión no le hace justicia.

Pienso que podría hacerse un argumento increíblemente colosal si se tuviera un cuenta a los artistas asiáticos. El Kpop y Jpop dan a conocer las mejores coreografías y bailarines que haya. Otra veterana que no podía faltar, como tampoco podíamos dejar de enlazar el percance que tuvo recientemente sobre el escenario. Pero alén de este descuido sus coreografías tienden a ser inmejorables.

Atención a la escena en que se marca un play back de un tema de Otis Redding en la tienda de discos en la que trabaja Andie. El tema que bailan en esta escena es una versión instrumental de un tango que se titula “Por una cabeza”, conformado por el argentino Carlos Gardel y Alfredo Le Pera. Muchas fueron los momentos interesantes de Love Actually, pero si nos centramos en el personaje de Hugh Grant (como Primer Ministro Británico), lo mucho más recordado es el baile que se marcaba a ritmo de «Jump » de The Pointer Sisters…

Al artista de los Rolling ahora lo había popular años atrás, en el momento en que Ike y ella consiguieron ser sus teloneros en el Royal Albert Hall. Tras el concierto, Tina y las coristas de su conjunto enseñaron a Jagger unos pasos de baile que más tarde añadió a sus espectáculos. “Jamás nos dio las gracias, hoy a Mike le agrada decir que su madre le enseñó a bailar.

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