En ningún caso, tus datos van a ser transferidos a terceros sin tu autorización. Por poner un ejemplo, animales como las jirafas o los caballos duermen unas 4 o 5 horas cotidianas repartidas en distintos ratos en todo el día. Tienen la posibilidad de hacer intervalos de entre 2 y 5 minutos y tener el reposo suficiente para estar alarma, preparados para escapar.
En el momento en que las aves se posan, nuestro peso del animal le obliga a flexionar las patas, como resultado se tensan los tendones y las garras se cierran, como una pinza. Las aves, que no son mucho más que dinosaurios con alas y chiquititos, heredaron la anatomía que tenían los enormes raptores. Aquellos animales poderosos contaban con ligamentos similares que, al impactar con su presa y doblarse, generaban el cierre a gran velocidad de las garras para así matar a la víctima. No tienen la posibilidad de llevarlo a cabo todas las aves, pero ciertas, las paseriformes, pueden volar a los árboles y sostenerse sobre las ramas. Muchas, de hecho, se quedan dormidas sin miedo a caerse de las alturas.
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Por Qué Razón Hay Animales Que Duermen Parado
Si observamos bien, todos ellos son animales que pueden ser presas de muchos géneros de predadores diferentes. Así que, por tener la facilidad de escapar si hace aparición un depredador u otros tipos de amenazas, prefieren dormitar parado a echarse en el suelo a reposar. En este punto, hay que mencionar el extraño caso de los pequeños loros llamados lorículos o Loriculus, entre los que hay 14 especies diferentes. Estas aves psitácidas o de la familia de los papagayos, son pequeñas, no sobrepasan los 15 cm en ninguna de las especies, y habitan en Asia. Lo más extraño de estos loros es su forma de reposar, que no es de pie, sino que duermen cabeza abajo y, por ello, se les conoce como loritos murciélago. Ciertamente, también emplean la técnica del bloqueo gracias al tendón flexor de las garras para soportarse.
Por ejemplo, las aves pequeñas o paseriformes, como las palomas y los canarios, tienen un sistema automático gracias a un tendón flexor que va por enfrente de la rodilla y luego pasa por detrás del tobillo para, por último, pasar por toda la garra. De este modo, cuando estas aves se posan en una rama, este tendón se flexiona y cierra las garras de forma fija, como una pinza, y tensa las patas aunque, naturalmente, es un mecanismo que tienen la posibilidad de relajar cualquier ocasión para salir volando. Además, hay otros géneros de aves, como los patos, que tienen la estabilidad muy creado. Una de las cuestiones comunes acerca de las costumbres de nuestras mascotas tiene que ver con sus hábitos de reposo, ¿de qué manera duermen los pájaros?
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Por eso, cuando no hace frío acostumbran a reposar mucho más de manera frecuente sobre 2 patas. Los espacios superiores, especialmente los árboles, les sirven de protección mientras que duermen. Los pájaros acostumbran a reposar en superficies altas, evitando el nivel del suelo.
Cuando los pájaros se duermen, doblan las patas para reposar y para que las plumas lleguen al suelo creando una suerte de manta protectora del frío en el interior. Con las patas dobladas, el tendón está en su máxima tensión, tira hacia atrás de los cuatro dedos y éstos se cierran como una pinza vigorosa. Si el ave se lúcida, va a levantar el peso del cuerpo, extenderá las patas y, de esta manera, el tendón liberará la garra. Afirmemos por adelantado que las paseriformes son las más frecuentes de las aves, casi media parta de los animales alados de todo el mundo forman parte a este orden. Una de sus especificaciones anatómicas más singulares es la disposición dactilar.
Por esto mismo, la mayor parte solo precisa dormir unas escasas horas al día y las reparten en distintos ratos a lo largo del día y la noche, jamás del tirón. La manera en que alcanzan sostenerse de pie mientras que duermen y no se caen es algo que puede producir mucha intriga, ya que nosotros si lo intentamos no tardamos en perder el equilibrio. La respuesta es que hay diferentes formas en que lo consiguen, pues hay especies que lo hacen de una manera y otras que de otro modo completamente distinto. Los patos y las aves acuáticas son especialmente especialistas en esto, pero también lo son otras especies de aves como los halcones y los mirlos. Las especies que usan esta adaptación también tienen la posibilidad de ser capaces de dormir mientras vuelan.
Estos son algunos de los pájaros que pasan más horas cada día durmiendo. En todo caso, el número medio de horas que duerme un ave es de una media de unas 10 horas, aunque es dependiente de la especie y de la temporada. Por otro lado, su sueño REM – que es el estado de sueño mucho más profundo – apenas dura 10 segundos, al tiempo que en los mamíferos se extiende hasta múltiples minutos. Podríamos decir que estos pájaros sí que duermen a base de echarse pequeñas siestas.
