42v] italianos garças, grullas, cisnes, patas brabas y todas las aves, y liebres, y traen galgos de socorro, y no caçan con ellos perdices. Varios señores los tienen solamente para efeto de tomar con ellos treínas para los halcones. Nótasse que si tal açor ubiere, no se largue a garça que esté sentada en el suelo, que lo matará con el pico. Otros açores crían en Grecia, en la Esclabonia, a estos llaman esclabos y son buenísimos. Otros crían en Cerdeña y los llaman sardos, son pescoçudos y de enormes cabeças, y toman bien las ánades y cuerbos, mas por tiempo se hazen ronceros.
43r] quando los toman bravos conbiene que aya caçador savio, que los amanse con arte y baya con ellos con bastante tiento, como queda dicho y se dirá en el capítulo siguiente. Antepuse los gavilanes a los açores y traté primero dellos pues los mucho más de los caçadores portugueses que hasta agora á avido començaron a utilizar esta caça de las aves por ellos, y se pasaron a la de los açores, de quien trata este capítulo. Son los açores en el talle y hechura muy semejantes a los gavilanes, aunque mayores de cuerpo, [fol. 30v] en cuya grandeça exceden a todas y cada una aquellas aves que se sostienen de rapiña (dejando aparte el águila, que esta a todas y cada una aventaja en la grandeça, de sus propiedades trataré adelante). Crían los açores sus hijos en muchas partes del universo, en sierras y sitios montuossos, llenos de enormes bosques y florestas; en estos hazen sus nidos.
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Cosas Que Has De Saber Antes De Colocar Un Comedero
El príncipe lo tubo sin hazer nada con él por estado, queriendo enbiar allá caçadores, por no ser el viage tan tratable como es oy no tubo efeto. En las islas de Cabo Berde crian halcones tagarotes que son muy geniales perdigueros. A muchos les puede suceder lo mismo que me sucedió a mí con don Pedro de Silva, tío del conde almirante. Compróme un açor de los de Galicia, excelente perdiguero y bien habituado, y tal que tubo él satisfación, assí del açor como de sus prácticas, y como bueno me lo pagó mui bien. Llevado, lo entregó a un indio de el llamado Borneo que él tenía por enorme caçador. El pobre indio, pareciéndole que todas las matas eran de orégano, sin elección de tierra ni [fol.
Por este motivo la interferencia del comedero en este periodo de tiempo sobre los hábitos de las aves es menor. Sin embargo en un medio urbano por sus particularidades, estos efectos pueden quedar muy diluidos mientras que tengamos presente que debemos variar el alimento hacia otro mucho más proteico. Alguien puede meditar que, para efectuar estas imágenes en el final hay que utilizar Photoshop, el trabajo minucioso de fotografiar un ave en su hábitat es, de alguna forma, menos arduo. Medow afirma que, para fotografiar a estos animales en su ambiente, no se puede tener prisa.
El Aspecto Como Arma Protectora De Las Aves Frente A Los Depredadores
Seguidamante analizamos ciertas estrategias de defensa de las aves que avalan lo manifestado con anterioridad. Pero este desarrollo, preciso a fin de que las aves tengan un pequeño reducto donde pasar el periodo estival, es costoso a nivel económico, tanto la limpieza con máquinas como el llenado, dado el precio de la luz, necesaria para poder obtener el agua que va a llenar estas pequeñas lagunas”, comenta desde el zoológico. La Cañada de los Pájaros, el zoológico y humedal ubicado en la provincia de Sevilla (de la Puebla del Río a Isla Mayor), solicita asistencia por “la escasa pluviosidad de este años y las tan altas temperaturas han secado la laguna, como en casi todo el ambiente de Doñana y que dejan a los pájaros sin agua. Carece de sentido meditar en atraer aves que no están presentes en el ambiente de tu terraza, patio o jardín, pues por supuesto si no pasan por allí jamás van a hallar ese comedero. Por ello es bueno dedicar un tiempo a ver que tipo de aves se dejan ver por la región, ciertas van a estar presentes de manera continua, otras van a pasar ocasionalmente mientras que se desplazan intentando encontrar comida, y otras simplemente no van a estar.
En estos nuestros tienpos se acabaron los açores en estas partes, que llegó a ser tan excesivo el precio que por cada uno (siendo pequeño) se dava, que los honbres cudiciossos que los cogían, en hallando el nido lo guardavan porque otros no se lo hurtassen. Vez ubo que unos escondidos esperavan que aquellos que lo guardavan fuessen a buscar de comer, y entretanto los hurtavan, y vinieron a quitarles a los pobres pájaros los güebos en poniéndolos, y los echavan a otras aves. A mí me contó uno destos , que suviendo a un árbol a tomar los güebos de un açor, la prima y el torçuelo se levantaron de revoleo y se subieron muy altos por el aire, y juzgó que de aquella vez se passavan al África, porque nunca más criaron en aquella sierra Bermeja [fol. Por ser muy semejantes estos açores aunque nacidos en diferentes partes, por evitar proligidad los pusse juntos en este capítulo, que ellos en la grandeça del cuerpo y talle como en los plumajes son muy semejantes, y aun en la vondad, puesto que los de Irlanda son tenidos por mejores perdigueros. 37r] parecer es por ser zahareños, que estos de qualquier parte que sean siempre se aventajan a los niñegos, mas después que yo crié açores en el aire ninguna virtud les hizieron los de Irlanda. Argüirme á el caçador que los açores de Alemania y Noruega y Suevia tanbién son zahareños y no son así como los de Irlanda, a que respondo que los açores alemanes son mayores de cuerpo, y por la grandeça son mucho más pesados y no son tan ligeros y livianos como los de Irlanda, que son de menos proporción.
El Arte De Las Aves Mediante Una Situación Cambiada
De invierno conviene se tenga industria buscando perdizes que no sean apuradas, teniendo cuenta que se esté el açor con una perdiz en tierra quatro o cinco vezes, y a la qual mejor volare dexará estar más tiempo agasajándolo, hablándole y dándole el coraçón y entrañas con algunas gordura, que entienda él que huelga con lo que hizo. 53v] quedaba con los ojos en la parte donde la perdiz la avía puesto, y por mucho que el caçador gritó a la perdiz levantada, el açor, embelesado, pareciéndole que la tenía cerca, se estuvo quedo, y la perdiz se escapó. Fue festexado este yerro de aquellos señores dando baya a Barroso, que se tenía por grande caçador, lo qual él sintió.
Una vez sepas de manera aproximada que especies tienen posibilidades de “toparse” con el comedero, lo acertado es escoger un diseño que se adapte a sus apetencias (frecuentemente pondremos más de un comedero para cubrir los deseos de diferentes aves). Este es el comedero de mi patio grabado desde la ventana del salón. Para “Bufón” , los gorriones son algo absolutamente irreprimible que debe contemplar a través del cristal.
