El texto de Mateo es de un carácter alegre y optimista, donde podemos encontrar un Hijo muy orgulloso de su Padre por el hecho de que éste es providente y candela constantemente por el bienestar de su creación. Ese optimismo de Jesús no únicamente ha de ser el nuestro a fin de que nos mantengamos firmes en la esperanza —«No andéis preocupados» — en el momento en que surgen las ocasiones duras en nuestras vidas. También debe ser un atractivo para que nosotros seamos providentes en un planeta que precisa vivir lo que es la auténtica caridad, esto es, la puesta del amor en acción.
La vida es más que la comida, y el cuerpo mucho más que el vestido. La atención de Jesús es a fin de que vivamos cada día. Hoy, y cada día, nos encontramos llamados a responder en cada situación específica y poner nuestra seguridad de manera permanente en Dios. Hoy, aquí y ahora es el momento de buscar el Reino y su justicia, a sabiendas de que lo demás se nos va a dar por añadidura.
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El Evangelio De Hoy Para La Familia
No podemos estar sentados y de pie al mismo tiempo. No podemos estimar garantizar nuestra vida y poner nuestra seguridad en Dios.
Cuántas preocupaciones con lo que vendrá, que frecuentemente ni siquiera llega y, si llega, jamás es como lo habíamos soñado o proyectado, nos impiden vivir y amar aquí y ahora. Cuántas ocasiones de servicio perdemos por estar preparando nuestro mañana o procurándonos nuestras satisfacciones. En expresiones de Benedicto XVI, «los hombres destinatarios del amor de Dios, se transforman en sujetos de caridad, llamados a hacerse ellos mismos instrumentos de la felicidad para dar a conocer la caridad de Dios y para tejer redes de caridad».
Un Equipo De 200 Sacerdotes Comenta El Evangelio Del Día
Pero asimismo nos recordó el Santo Padre que la caridad tiene que ir acompañada de la Verdad que es Cristo, a fin de que no se transforme en un mero acto de filantropía, desvisto de todo el sentido espiritual católico, propio de los que viven según nos enseñó el Maestro. Adsis es un movimiento de comunidades cristianas, formado por hombres y mujeres que queremos vivir el Evangelio de Jesús por medio de una presencia fraterna y solidaria entre los jóvenes y los pobres. No podemos estar al plato y a las tajadas.
